Tradicionalmente, los anuncios han presentado a las mujeres en la casa, empleando productos de limpieza, sirviendo la comida, en tareas de costura o utilizando nuevos electrodomésticos. Los hombres, sin embargo, predominan en los anuncios de automóviles, viajes, servicios bancarios, compañías industriales o bebidas alcohólicas. La voz de autoridad casi siempre es masculina.
En la moda, la mujer se vuelve objeto de deseo de la mujer. Todas anhelamos ser la chica de la campaña, a la que se la ve tan espléndida y a la moda en las piezas gráficas de determinada marca. Esta identificación (aunque sepamos que es una modelo) deviene en la experiencia de compra. La mujer, en algún punto, quiere verse en su vida cotidiana tan chic como la chica de la publicidad.
En las campañas de moda, generalmente, la mujer sale del papel de sumisión en donde se la representa en otras industrias, para tomar el poder hasta el punto tal de demostrar su autosuficiencia con ciertos vestigios de masculinidad.
Campaña Rapsodia
Campaña Rapsodia
La campaña otoño- invierno 2014 de Rapsodia representa a una mujer ecléctica que prefiere ante todo la originalidad en el vestir y no pasa desapercibida en ningún momento del día. Las fotos hacen hincapié en los looks nocturnos, que aparecen plagados de bordados y muestran al terciopelo negro, como la vedette de la temporada. La intensa inspiración folk se refleja mediante bordados inspirados en Turquía, chaquetas bomber, maxifaldas acampanadas y sacos de hombros marcados. En cuanto a la modelo, la mujer Rapsodia está representada por una protagonista de rasgos escandinavos, de piel muy blanca y cabello rubio platinado. La actitud la representa aniñada y sugerente a la vez, con una mirada impactante.
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